Debemos recodar que las antiguas sociedades masónicas operativas, eran constructores que, posiblemente, no conocian el significado de nuestros símbolos masónicos, con relación a sus herramientas de trabajo. Luego vino el tiempo de transición, en el que las sociedades masónicas fueron admitiendo miembros con más intelecto, llamados “aceptados masones”.
Diversos escritores, se refieren a los francmasones especulativos, diciendo: “los masones actuales, son hombres que descubrieron repentinamente, el significado espiritual de las herramientas de las que nuestros antepasados no sabían nada. Esto permite entender el ritual masónico en sí mismo, que supuestamente ofrece al candidato una distinción a considerar entre la masonería operativa y la especulativa”.
Para concretar, personalmente estimo que las Logias Lautarinas estuvieron integradas por francmasones, que resolvieron actuar como operativos, pues no cabían especulaciones ante la necesidad de independizar Latinoamérica de España.
Recurro al distinguido historiador inglés Jasper Ridley, para aclarar un primer problema, dice: “No hay dudas que todos los revolucionarios sudamericanos eran francmasones y miembros de la Logia Lautaro y, las controversias se deben solamente sobre el origen de esa Logia”.
Ridley agrega además. “Los revolucionarios argentinos en 1810 constituyen la Logia Lautaro en Buenos Aires. Posteriormente apoyan la instalación de la Logia en la ciudad de Mendoza, luego en Santiago de Chile, siguiendo a otras regiones de América del Sur, independizándose de España, con la acción de un ejército revolucionario proveniente de Argentina, al mando del General José de San Martín. Venezuela y las zonas al norte de América del Sur, fueron liberadas a través de una serie de revoluciones dirigidas por Simón Bolívar, quien finalmente se unió victoriosamente con San Martín en la ciudad de Guayaquil, en lo que hoy es Ecuador”.
Ridley acota además: “Los llamados Libertadores, O´Higgins, Bolívar, San Martín (entre otros) eran francmasones, pertenecientes a una red de sociedades masónicas sudamericanas, conocidas como la Logia Lautaro”.
Se dice, que todo habría comenzado en 1807 con los Caballeros Racionales, dirigidos por el QH:. Francisco de Miranda y, la fundación de la Logia, en el año 1811 en Cádiz, primera filial con el nombre de Logia Lautaro, haciendo referencia al “toqui mapuche quien luchó contra los conquistadores españoles, en el siglo XVI, ayudando a mantener parte de la Araucanía independiente de la corona española, hasta la ocupación por el ejército chileno en el siglo XIX”.
Por su parte nuestro QH:. Marcelo Molina, acota un su trabajo Las Logias Militares en la Independencia Americana, que: “cuando se habla de la conexión entre la masonería y la independencia de los países latinoamericanos, debemos destacar a la legendaria Logia Lautaro o Lautarina, cuyo nombre proviene de una frase vertida por el QH:. Bernardo O´Higgins en una conversación con el QH:. Francisco de Miranda”, cuyo texto es: “Señor, mirad en mí, tristes restos de mi compaisano Lautaro; arde en mi pecho ese mismo espíritu que libertó entonces al pueblo de Arauco, mi patria, de sus opresores”.
Luego agrega el QH:. Molina. “Salvo algunas opiniones de personajes no muy bien informados, no caben dudas que estas Logias Lautarinas eran masónicas, tal como lo demuestra el importante historiador y QH:. Carlos Wise, en una amplia investigación sobre el tema”.
Además emite otra interesante opinión: “Pues bien, estas Logias no eran estrictamente de carácter militar, sino sobre todo de carácter político, ya que propugnaban y buscaban la libertad de la monarquía española. De hecho lo plantean en sus Estatutos”.
Es importante señalar algunos párrafos de una publicación de las ediciones de Pentalpha de Quito. Me refiero al capítulo Nº 8, de la publicación señalada en la bibliografía, con el título de Francisco de Miranda y su labor progresista.
“Como conocedor profundo de la situación política de toda Europa, Miranda sometió sus puntos de vista al Supremo Consejo de la Fracmasonería Primitiva de Francia, en marzo de 1795, y obtuvo la autorización para organizar una Logia Madre entre los refugiados de las colonias hispanoamericanas”.
“Los componentes de esta Logia Madre se dedicaron a establecer relaciones normales con todos los individuos y agrupaciones a fines, europeas y americanas, para fundar varias Logias en Londres”.
“Como resultado de esta labor, levantó columnas en junio de 1798 la Gran Logia Hispanoamericana, siendo su Gran Maestro Francisco de Miranda. Las tres primeras Logias fundadas en Londres se denominaron: Lautaro Nº 1; Caballeros Racionales Nº 2; y Unión Americana Nº 3. La primera debía preocuparse de preferencia por los asuntos de los pueblos del Atlántico de América del Sur; la segunda por los de la costa del Pacífico; y, la tercera por los de Nueva España hasta Panamá, incluyendo las Antillas”.
“Como organizadores principales, además de Miranda, el limeño Pablo de Olavide; el cubano Pedro José Caro, el peruano José del Pozo; el chileno Manuel José Salas; y el neogranadino Pedro Fermín Vargas, colaborador de Antonio Nariño. Cuando la sede de la Logia Madre cambio a París, el número de sus componentes aumentó considerablemente con otros notables hombres, entre ellos Bernardo O´Higgins.”
También resultan interesantes algunos párrafos del libro de nuestro QH:. Luis Pradenas: “En marzo de 1812, apenas regresados a Buenos Aires, desde Europa, varios destacados luchadores por la independencia hispanoamericana, comisionaron al QH:. José de San Martín para crear y organizar un cuerpo militar de caballería, denominado Regimiento Granaderos a Caballo; entre ellos el QH:. Julián Álvarez, V:. M:. de la Logia Independencia, también conocidacomo San Juan, quienesacordaronconstituir la Logia Lautaro”.
“Esta logia matriz operó en Buenos Aires con la presidencia del QH:. Carlos María de Alvear y como vicepresidente el QH:. José de San Martín. Se debe destacar que el régimen de gobierno de este Taller fue de tipo dictatorial, al estilo de los Caballeros Racionales, con dos tendencias, por un lado los partidarios de una monarquía constitucional; y por el otro lado se ubican los de un sistema republicano, al cual accede posteriormente Simón Bolívar”.
“Por diversas situaciones y desacuerdos, el QH:. Carlos María de Alvear se exilia a Montevideo en 1815, donde al poco tiempo constituye la Logia Caballeros Orientales, con influencia Lautarina”
“No obstante estas diferentes concepciones, José de San Martín y Simón Bolívar elaboran y conducen cada cual una estrategia de liberación continental, avanzando el primero desde las Provincias Unidas del Río de la Plata por el sur y el segundo desde la Gran Colombia por el norte”.
Es importante recordar que el QH:. San Martín constituyó una nueva Logia Lautaro en la ciudad de Mendoza y posteriormente, luego del Paso de Los Andes del ejército libertador, en la ciudad de Santiago.
Hasta este momento la historia de las Logias Lautarinas es bastante clara, aunque en mis modestas investigaciones, para presentar esta plancha, me encontré con importantes opiniones de dos estimados hermanos.
El QH:. Carlos Fredes en su Historia Chile se refiere en los siguientes términos: “En Cádiz, San Martín había ingresado a la fracmasonería, institución libertaria y tolerante. Llegando a Buenos Aires fundó la Logia Lautaro, dentro del esquema general de las logias Lautarinas a las que pertenecieron la mayoría de los libertadores de América”. “No se trata de logias masónicas regulares, que son por definición ajenas a partidismos políticos o religiosos. Se trataba de masones y de no masones que convenían en reuniones bajo secreto para promover y sostener la independencia americana”. “(El accionar de estas logias, que trabajaban bajo riguroso secreto que salvaguardaba la vida de sus miembros, es sumamente contradictorio por carencia de fuentes confiables. Entre una abundante bibliografía creada a despecho de lo anotado, resaltan por su seriedad los trabajos del historiador católico Jaime Eyzaguirre y, desde el sector masónico, las obras de Benjamín Oviedo y René García Valenzuela)”.
Por su parte el QH:. Guillermo Fuchslocher, destacado intelectual ecuatoriano, nos dice: “Las Logias Lautarinas son un tema muy complejo, en que se mezclan materiales de viejos historiadores, que no aportan fuentes ni pruebas de sus afirmaciones, con material aparentemente histórico, pero con sesgos mítico masónicos, o anti masónicos, o de tipo político liberal-conservador, o izquierda-derecha”.
Agregando: “A esto se suma el sesgo de cierta corriente historiográfica que solo considera masónicas a las logias que siguen el modelo de la Gran Logia Unida de Inglaterra, desconociendo que las Logias Lautarinas representan un tipo de masonería independentista, con el mismo derecho a su particularidad, que las masonerías cristianas, esotéricas, laicas, conservadoras, liberales, filantrópicas, etc.”
Para finalizar estos apuntes históricos, me permito manifestar que para la lucha independentistas en Chile, como respaldo organizativo y de principios, se constituyó en Santiago la Logia Lautaro, en 1817. La integraron hombres de bien, con valor sin límites, sin temor a la muerte por sus ideales y, con sólida formación ética, filosófica e iniciática, es decir francmasones.
Transcribo parte del acta de constitución de dicha logia:
“Habiendo sido disuelto el gobierno español por la prisión de su monarca; por la ocupación de España y por otras innumerables causas, la justicia, la razón y la necesidad imperiosa de sacudirnos del yugo que somete a América”.
“Las provincias del Rio de la Plata han dado la señal de libertad; se revolucionaron, pero, desgraciadamente, sin sistema, sin combinación y casi sin otro designio que el que les indicaban las circunstancias, los sucesos y los accidentes”.
“Este ha sido el motivo del establecimiento de esta Logia Lautaro, que debe componerse de caballeros americanos, que distinguidos por la liberalidad de las ideas o por el fervor de su patriótico celo, trabajen con sistema y plan en la independencia de la América y su felicidad, consagrando a este nobilísimo fin todas sus fuerzas, su influjo, sus facultades y talentos, sosteniéndose con fidelidad, obrando con honor y procediendo con justicia, bajo la observancia de las siguientes constituciones”.
V:. M:. y QQ:. HH:., a modo de conclusiones e importante aclaración. El presente trabajo tiene muy pocas opiniones personales, está basado en lecturas, escritos e informaciones obtenidas en publicaciones serias y de prestigio. En la bibliografía se detallan lo que he tenido a la vista.
No es una invitación a seguir este interesante ejemplo de distinguidos francmasones, que combinaron lo especulativo y la operatividad. Ni mucho menos tomar las armas. Simplemente respaldar los pasos de nuestra Orden en sus acciones extramuros y poner en plena vigencia a nuestra masonería.
Es posible que por despreocupación, tibieza o simple comodidad, muchos de nuestros QQ:. HH:., en Latinoamérica, los principios masónicos no son bien considerados, más preocupados del acontecer logial, del trabajo intelectual o del importante hacer fraternal.
Por ello, el mundo se nos presenta como un desafío aventurado, al cual queremos responder de modo individual y, por lo tanto, parcial y deformado.
Como resultado, los masones y nuestras instituciones fundamentales, las Logias, carecemos de planes concretos, de finalidades y objetivos sólidos para el ejercicio de una actividad extra muros de importancia.
Reitero que el cambio de época es urgente y no podemos quedar fuera de la historia. Les invito a la búsqueda del verdadero lugar que debe tener la Orden, en concordancia con su rica historia.
Bibliografía:
- Libro: “Los Masones, la sociedad secreta más poderosa de la tierra”, del historiador británico Jasper Ridley (1920 – 2004), conocido por sus libros y biografías de carácter histórico.
- (Editores Javier Vergara – Barcelona – 2004).
- Folleto (95 páginas): Actuación de la Fracmasonería Primitiva en la emancipación de América y labor progresista de Francisco de Miranda. Autor con el seudónimo de José María Antioqueño. (Documento fechado en París a 28 de marzo de 1900). (Ediciones Pentalpha, Quito 2003).
- Libro: “Lautaro en París”. Autor Luis Pradenas del Centro Extraterritorial Latinoamericano de Estudios Masónicos. (Ediciones Lautarinas – París – 2020).
- Revista Masónica de Chile – 2009. Artículo: “Las Logias Militares en las guerras de la Independencia”, de Marcelo Molina.
- Libro:” Historia de Chile” del destacado historiado y QH:. Carlos Fredes Aliaga.
- (Editorial Cultural S.A. – Madrid – Impreso en España 2001).
- Investigación de las Logias Lautaro – Ediciones masónicas J.O. Pons & N.F. Pons Belmonte – 1980.